Cristina Fernández viuda de Néstor Kirchner vive en un mundo paralelo, ajeno a la realidad. Dice que el que se le sigue es un juicio político, pero los dictámenes de los fiscales están repletos de datos que prueban la existencia de una asociación ilícita. Sostiene que se la juzga por decisiones políticas, pero Gerardo Pollicita e Ignacio Mahiques demostraron que tanto ella como Néstor Kirchner direccionaron plata del presupuesto nacional hacia el ex empleado bancario y monotributista al que transformaron en el rey de la obra pública.