La prensa canalla

Traicionaron el oficio más lindo del mundo. Se transformaron en vigilantes de sus propios colegas. Ejercieron el rol de comisarios políticos en medios grandes, medianos y pequeños. Trabajaron de topos en las redacciones. Presentaron como material “periodístico” videos obtenidos de manera ilegal por los servicios de inteligencia del Estado. Señalaron con el dedo a periodistas críticos, por orden directa de Néstor Kirchner, Cristina Fernández y Máximo Kirchner. Inventaron acusaciones falsas. Adulteraron la información y la opinión. Cometieron delitos de orden público, como la incitación a la violencia contra trabajadores de prensa. Armaron tribunales populares contra periodistas que hicieron más por los derechos humanos que Néstor y Cristina. (Y no después de 2003, sino cuando las papas quemaban de verdad.) Algunos entregaron su alma al dinero del Estado. Casi todos encontraron la excusa perfecta para pasarse al Lado Oscuro.

Uno, por ejemplo, escribió en su cuenta de Twitter que, en efecto, había abandonado el oficio porque creía en el periodismo militante. Otro, al que Jorge Lanata caracteriza por estar enamorado de su propia voz, explicó su compromiso con el gobierno anterior con el argumento de que “todo periodista y todo medio es un actor político”. El locutor de pésima sintaxis se colocó a sí mismo en un lugar muy “popular”. Como si fuera el líder de una vanguardia iluminada. O como si estuviera denunciando, desde el llano, a un grupo muy poderoso, y no defendiendo a una secta política que llegó a tener más poder que cualquier otro gobierno. Ahora, con el mismo desparpajo, habla de “resistencia” contra la nueva administración de derecha, a la que compara con una dictadura. Y lo hace desde un programa financiado por un banco que se presenta como cooperativista, pero que, a la hora de cobrar a sus clientes, sigue las reglas del capitalismo más salvaje.

Otro, al que Kirchner infló su enorme ego al susurrarle, por teléfono, que era uno de los pocos periodistas que respetaba, nunca pudo terminar de explicar de manera coherente su imprevista y brutal conversión. Tampoco pudo desmentir la denuncia que hizo un ex funcionario del Ministerio de Trabajo del gobierno del propio Kirchner, quien lo acusó de tener una doble moral al pretender cobrar decenas de miles de pesos sin presentar la factura correspondiente. El hombre, quien también se caracteriza por escuchar su propia voz, es un especialista en decir una cosa y hacer otra. La evidencia: amenazó con sostener una demanda contra quien esto escribe, pero abandonó el trámite a mitad de camino, ante la imposibilidad de probar que el demandado había faltado a la verdad. Pero además instruyó a sus asistentes para ensuciar a colegas a diestra y siniestra. Una de sus colaboradoras (quien será recordada, entre otras bajezas, por haber difundido las fotos del cadáver de Nora Dalmasso) se especializó, además, en construir “denuncias periodísticas” falsas, revoleando números a la marchanta, con decimales incluidos, para obligar a sus “víctimas” a desmentir hechos que no constituyen delitos, sino datos de proyectos periodísticos exitosos, con altos niveles de audiencia. Lo de la supuesta cronista no es un acto de periodismo profesional, sino una maniobra típica de los servicios de inteligencia.

Durante estos años, se usó a la AFIP para acusar de manera falsa a colegas y dirigentes opositores que levantaban la voz. Pero los periodistas canallas no fueron pocos. Se multiplicaron por decenas. Quizá porque soñaron que Cristina sería eterna. Y hubo de todo. Ex empleados del Grupo Clarín despachados hasta panelistas de programas de espectáculos que sacaron a relucir el pasado combativo de su familia porque sabían que la lucha contra la dictadura otorgaba un linaje extra en el gobierno K. Cronistas deportivos devenidos en panelistas expertos en provocar a sus compañeros; profesionales que se caracterizaron por denunciar la corrupción de los años noventa y empezaron a impulsar operaciones políticas contra los candidatos que compitieron y le ganaron a Kirchner; productores de televisión que fueron “neutrales” hasta que firmaron contratos millonarios con dueños de multimedios a los que Néstor y Cristina beneficiaron con frecuencias de radio y de tevé; secretarios generales de sindicatos de prensa del interior del país que, en vez de defender los derechos de los trabajadores, se dedicaron a hacer de comisarios políticos para malograr emprendimientos independientes.

Los representantes de la prensa canalla ahora parecen un poco desorientados. Andan como bola sin manija reclamando libertad de expresión cuando se la pasaron insultando, difamando y acusando sin pruebas. Pero lo que suplican, en el fondo, es la continuidad de sus contratos en los medios públicos, como si su jefa política no hubiese sido la gran responsable de la reciente derrota electoral. Como si Daniel Scioli no hubiera perdido, sino ganado. Están pidiendo, además, indemnizaciones millonarias, como si fueran trabajadores del sector privado con derecho a reparación económica. La última estrategia de estos militantes de la desinformación no es ningún misterio. Intentan presentar a los periodistas críticos como la otra cara de una falsa moneda. Son parecidos al ladrón. Dan por sentado que todos son de su misma condición. Por eso quedan tan descolocados cuando comprueban que los mismos colegas que denunciamos los atropellos de Néstor y Cristina somos capaces de levantar la voz ante la abusiva designación por decreto de los jueces de la Corte que pretende imponer Mauricio Macri. Por eso aparecen pedaleando en falso cuando criticamos la represión de los trabajadores de Cresta Roja o decimos que no es suficiente ser un gran amigo del Presidente para ocupar el cargo de número uno de la Agencia Federal de Inteligencia.

Porque podemos cometer errores. Incluso grandes errores en la práctica de nuestro ejercicio profesional. Pero jamás seremos como ellos. No trabajaremos de comisarios políticos. No acusaremos sistemática ni falsamente a ningún colega sólo porque no piensa como nosotros. No diseñaremos programas de propaganda para ensuciar a nadie. No ocultaremos, a sabiendas, asuntos como la tragedia de Once, el presunto enriquecimiento ilícito de la ex presidenta, el procesamiento del ex vicepresidente o el financiamiento de la campaña presidencial de 2007 con fondos provenientes de la efedrina y el narcotráfico.

Pero algún día, no muy lejano, ayudaremos a escribir la historia de los últimos 12 años de la prensa canalla en la Argentina. No como un método de escrache, sino como un inolvidable registro de época. Y como un indispensable servicio a las audiencias. Para que todo el daño que provocaron no se vuelva a repetir.

Publicado en La Nación 

Luis Majul

Periodista, escritor, guionista, conductor de radio y televisión, productor de cine, teatro y TV.

En televisión, conduce La Cornisa, los domingos a las 20:30, y Más Nación, de lunes a viernes a las 21. Los dos ciclos por LN+. En radio, conduce Majul 1079, de lunes a viernes de 13 a 16 horas, en El Observador 107.9

En mayo de 2023 creó la FM El Observador 107.9, donde es director y accionista. La nave insignia de la nueva radio es el Grupo de Medios El Observador de Uruguay, de Gerardo Werthein y Gabriel Hochbaum.

Es el fundador del primer espacio audiovisual de periodismo argentino denominado Margen del Mundo donde se exhibe la muestra permanente De Walsh a Lanata, 40 años de Periodismo Argentino.

En 2010 creó el sello editorial Margen Izquierdo que lleva publicados los títulos Lanata, La Dueña, Yo Acuso, Nisman, Converso, Las caras de la mentira, La década sakeada, Es el peronismo, estúpido, Ella Miente, La Batalla Final de Cristina, y La Gran Estafa, entre otros.

Además es editor de hipercritico.com, un espacio destinado a analizar a los críticos, comentaristas y analistas de la política; el deporte en general y el fútbol en particular; la televisión, el cine, la literatura, los medios y los periodistas.

Desde marzo de 2020, es Director de 107.9 Radio Berlín. Los 90 y los 2000.

Carrera periodística

Con estudios secundarios en el Colegio Mariano Moreno, inició su carrera periodística en 1979.

En 1982, en la revista El Porteño, le hizo un  reportaje a César Luis Menotti antes de la reinstauración democrática: “Yo pude haber sido Perón”, se tituló. Ese año se incorporó a la agencia Diarios y Noticias (DyN).

En 1984, ingresó a la emblemática revista El Periodista de Buenos Aires. En 1985 trabajó en La Razón, dirigido por Jacobo Timerman.

En abril de 1999 comenzó a conducir La Cornisa, su programa periodístico que empezó por una señal de cable, P&E.

En el 2000 creó su propia productora La Cornisa Producciones y el programa se emitió por un año en Canal 7. Desde 2001 hasta 2019 lo condujo por América TV. A partir de 2020, lo hace por LN+, atravesando su temporada 23.

Televisión

En 1993 hizo su desembarco en la televisión como co-conductor de A dos voces con Marcelo Bonelli por Todo Noticias.

En 1996 escribió su primer guión para la tv: una serie policial llamada El Arcángel, que se emitió por Telefé. Fue analista político de Telefé Noticias hasta fines de 1998.

En 2003, produjo el documental político Por qué, conducido por Jorge Lanata y que sirvió como base para la película Deuda.

En 2005 produjo la última temporada de Televisión Abierta, una idea original de Mariano Cohn y Gastón Duprat, que se emitió por Canal 7.

Desde noviembre de 2004 hasta 2009, condujo Hemisferio Derecho por Canal (á), un ciclo de entrevistas que profundiza en las ideas y la vida de los personajes de la cultura argentina y latinoamericana.

En el 2014 dio inicio a Un mundo con Periodistas. El programa consistió en entrevistas realizadas, de manera alternativa, por Luis Majul, Pablo Marchetti y Pablo Sirvén a los hombres de prensa más influyentes de los últimos 40 años.

Desde 2018 hasta diciembre de 2019 fue conductor de 4 Días por A24. Hasta ese entonces y durante 18 años, también condujo La Cornisa por América TV.

En 2020 condujo “Mirá lo que te digo”, de lunes a jueves a las 21, por La Nación Más.

Desde 2021 hasta hoy, conduce +Nación, de lunes a viernes a las 21. De lunes a viernes a las 8, hace 8:00 AM, y continúa con el clásico La Cornisa, todos los domingos a las 20:30, por LN+.

Radio

En marzo de 1994 fue columnista de Primera Mano y Tiempos modernos, dos programas de Radio Continental.

En el 2000, inició La Cornisa en Radio Uno (FM 103.1), y al año siguiente pasó a Radio Show. El ciclo continuó durante el año 2002.

Entre los años 2003 y 2004 condujo La Cornisa de 6 a 9 por FM HIT (105.5).

En 2005 condujo La Cornisa por POP Radio 101.5, y en 2006 pasó a Radio La Red (AM 910), donde condujo Espíritu Crítico. En 2008 volvió con La Cornisa por Radio La Red. Hasta el 2015 estuvo con La Cornisa en la tarde de Radio La Red y posteriormente con el programa Majul 910 de 9 a 12 hasta 2017.

En 2019 condujo La Tarde de CNN de lunes a viernes de 16 a 19 por CNN Radio Argentina y Play Luis todos los jueves a las 20 por Berlín (www.berlin1079.com), radio de la que es creador y hoy se sintoniza en FM 107.9.

En 2020 condujo La Mañana de CNN de lunes a viernes de 10 a 12, también por CNN Radio Argentina.

En 2021 condujo Esta Mañana de lunes a viernes de 5:55 a 9, por Radio Rivadavia.

En radio, conduce Majul 1079, de lunes a viernes de 13 a 16 horas, en El Observador 107.9.

Libros

Por qué cayó Alfonsín, el nuevo terrorismo económico. Editorial Sudamericana, Bs. As., (1990).

Los dueños de la Argentina, la cara oculta de los negocios. Sudamericana, Bs. As., (1992).

Los dueños de la Argentina II, los secretos del verdadero poder. Sudamericana, Bs. As., (1994)

Las máscaras de la Argentina. Editorial Atlántida, Bs. As., (1996).

Los nuevos ricos de la Argentina, tiburones al acecho. Sudamericana, Bs. As., (1997).

Periodistas, qué dicen y qué hacen los que deciden en los medios. Sudamericana, Bs. As., (1999).

La iluminada (Una biografía sobre Elisa Carrió). Sudamericana, Bs. As., (2003).

Confesiones Argentinas. Un viaje por el alma de las personas que admiro. Sudamericana, Bs. As., (2006).

El Dueño, historia secreta del ex presidente Néstor Kirchner. Editorial Planeta, Bs. As., (2009)

El y Ella, Editorial Planeta, Bs. As., (2011).

Lanata. Secretos, virtudes y pecados del periodista más amado y más odiado de la Argentina.Editorial Planeta, Bs. As., (2012)

El final, de la locura a la normalidad. Editorial Planeta, Bs. As., (2016)

Margen del Mundo

En octubre de 2014 inauguró un multiespacio audiovisual de periodismo argentino. Dentro del Distrito Audiovisual de Buenos Aires, se encuentra este lugar en el que coexiste el trabajo de una productora con la circulación del público. Contiene De Walsh a Lanata, una muestra audiovisual de los últimos 40 años de periodismo en la Argentina. Tiene como materia prima original un complejo trabajo de investigación en la que el público y periodistas de distintos medios respondieron cuáles son los profesionales más influyentes de los últimos 40 años. El documental multipantalla, la biografía de los periodistas más influyentes, la carta de Walsh, el speakers’ corner, la radio, la biblioteca y el Bistró de los Periodistas son algunas de las secciones del lugar.

Sello editorial

En 2012 creó Margen Izquierdo, un sello pensado para la edición de investigaciones periodísticas independientes. Lanata. Secretos, virtudes y pecados del periodista más amado y más odiado de la Argentina es la investigación más completa y detallada sobre la vida pública y privada del exdirector de Página 12 y la primera obra  que se publica con este sello editorial. En 2013 también publicó Converso (Historia íntima de la brutal transformación personal, profesional y económica de Víctor Hugo Morales, el relator más polémico de la Argentina), de Pablo Sirvén.Otros títulos: Yo Acuso, 40.Doc, La Otra Hechicera, Nisman, Crítica de la razón populista, Guarangadas K, In Memoriam, Los agentes de Néstor y Cristina, La Dueña, Yo, el peor de todos, Las caras de la mentira, Es el peronismo, estúpido, Ella Miente, La Primera Revuelta Fiscal de la Historia, La Batalla Final de Cristina, y La Gran Estafa.

Feria Leer y Comer

En 2015 ideó una feria del libro y la gastronomía que reúne alos dos placeres al aire libre y con entrada gratuita. En cada edición, reconocidos chefs, escritores, periodistas y editoriales salen a la calle a interactuar con el público. Comida, libros, food trucks son las características principales de esta feria. Además, en los auditorios se lleva a cabo una maratón de charlas y presentaciones de libros. La feria lleva realizadas 14 ediciones.

Filmografía

En octubre de 2006, estrenó la película Yo Presidente –una idea original de los directores Mariano Cohn y Gastón Duprat–, donde se encargó de la producción general y periodística. Obtuvo el Premio del Público en el Festival Internacional de Cine Independiente de México, y el Premio a Mejor Película Documental en el Festival de Málaga.

Teatro

En 2014 comenzó a producir junto a Mario Segade la obra de teatro “…Y un día Nico se fue”, basada en un libro de Osvaldo Bazán, dirigida por Ricky Pashkus, con música de Ale Sergi del grupo Miranda.

Premios

En 2004 ganó el premio Martín Fierro al mejor noticiero, como integrante del equipo de América Noticias.

En mayo de 2010, con La Cornisa recibió de APTRA el premio Martín Fierro como mejor programa periodístico en televisión de 2009.

En julio de 2019, recibió el premio #FundTV a la trayectoria por los 20 años de La Cornisa.