Cómo gobernar con minoría parlamentaria sin perder autoridad. Cómo hacerlo sin que lo confundan con Fernando de la Rúa. Cómo evitar que le impongan leyes que engorden el déficit fiscal, retrasen el control de la inflación y posterguen el crecimiento de la economía. Qué decisiones tomar para que los inversores extranjeros no interpreten el equilibrio de poderes como la imposibilidad de implementar las reformas estructurales que la Argentina necesita. Estos son los dilemas del Presidente, cumplido un año de su gestión.