(Columna presentada en Radio Berlín y publicada en Infobae) La enorme lista de senadores peronistas no K que se negaron a dar el quórum para permitir el allanamiento de los domicilios particulares de la expresidenta, el negacionismo de figuras públicas como Pablo Echarri, Víctor Hugo Morales y Estela de Carlotto y los datos de las encuestas que indican que Cristina Fernández se mantiene en los mismos niveles de apoyo que tenía antes de la megacausa de los cuadernos confirman una teoría inquietante: en la Argentina, el cinismo, la mentira y el relativismo moral son la segunda fuerza política del país.