El Presidente, en medio de la tormenta perfecta

Cuando todavía no se terminaba de acomodar en su nuevo rol de protector y cuidador de los argentinos con miedo al coronavirus, Alberto Fernández ya aparece en el medio de una tormenta perfecta. La demanda de alimentos al Estado es cada vez mayor, y más sostenida, y no alcanza a ser satisfecha. Para colmo, se paralizó unos cuántos días, como consecuencia de la denuncia de sobreprecios que cobraban los intermediarios y pagaba tarde y mal, el propio Estado.

Leer más...