No se puede ni se debe jugar con las expectativas de la gente. No se puede ni se debe, desde el poder o desde la oposición, jugar al gato y al ratón, porque la mentira tiene patas cortas. Y las medias verdades también. Alguien con autoridad, el Presidente, la vicepresidenta o el gobernador de la provincia, tienen que salir a decir cuál es la política sobre los presos y el coronavirus. A lo largo y a lo ancho del país y en el distrito más populoso de la Argentina.