Los audios que acabamos de escuchar son tóxicos. Vomitivos. Hay que dar el crédito a Camilo Cagnacci de PeriodismoyPunto, porque los consiguió. Pero eso no evita la repugnancia por el hecho. Para que se entienda bien: se trata de dos espías de la AFI, quienes, a principios de febrero de 2019, todavía en actividad- traicionando su obligación de defender al Estado de la Nación bajo el gobierno de Macri- ofrecieron al abogado de Hugo Moyano, una “solución” inmoral (y también ilegal) para los problemas que su hijo Pablo tenía (y sigue teniendo) con la justicia.