En el gobierno están contando las horas para decidir si se vuelve a fase uno o a restricciones más duras, con algunos permitidos. Sería bueno que, sobre todo, desde la provincia de Buenos Aires, el ministro de Salud, Daniel Gollán, deje de gritar y empiece a controlar en serio, por ejemplo, la apertura de ferias multitudinarias que abren todos los días, y no solo el fin de semana. También sería bueno que el Presidente convoque al jefe de gobierno de la Ciudad para empezar a discutir los anuncios desde ahora, y no que lleguen como una imposición.