A poco más de un año de las elecciones presidenciales, el gobierno en general y Néstor Kirchner en particular no encuentran la llave para abrir la puerta que les garantice la permanencia en el poder por otros cuatro años.

Si se repasa con detenimiento la foto de la actualidad, nada parece resultar según los deseos del ex presidente. Veamos.

Un juez termina de dictaminar que Fibertel debe seguir prestando servicio a sus clientes.

Mario Das Neves acaba de tirar abajo la esperanza de Kirchner de contar aunque sea con un competidor en las primarias de agosto.

La acusación contra los accionistas de Papel Prensa de haber adquirido la empresa bajo una mesa de torturas no tiene casi ninguna posibilidad de ser considerada por la justicia. Al contrario. El testimonio de Julio Saguier en el que revela que Lidia Papaleo le confesó que el Gobierno le habría ofrecido primero 200 mil dólares y luego 2 millones de dólares a cambio de sostener la falsa acusación coloca a la administración kirchnerista en una situación todavía más incómoda.

Daniel Scioli mide los tiempos con precisión y analiza qué le conviene más: si romper con el jefe que lo acaba de retar y presentarse como candidato a Presidente o resistir desde adentro para ir por la reelección en la provincia. Clic. En cualquier caso, está claro que no moverá un dedo para favorecer a Kirchner en su pretensión de volver a la Casa Rosada.

Pero eso no es todo.

La última intervención quirúrgica coloca al ex presidente en una posición de doble vulnerabilidad. Porque no solo debe cuidar su salud de manera extraordinaria. Además necesita demostrar a los tiburones del peronismo que detectan sangre humana a considerable distancia que está mejor que nunca. El médico y periodista Nelson Castro aseguró que ningún profesional recomienda a un paciente con los problemas de Kirchner viajar en avión diez días después de haberle sido colocado un stent ¿El ex presidente viajó igual a Nueva York porque recibió las garantías médicas mínimas o porque lo hizo bajo su exclusiva responsabilidad de adulto, a pesar de las sugerencias de su médico? Si la segunda opción es la verdadera, hay que decir que no sería la primera vez que desobedece a su equipo de profesionales.

Como si esto fuera poco, no hay ninguna encuesta seria que afirme que Kirchner tiene posibilidades de ganar en segunda vuelta. Ni con él como candidato ni proponiendo la reelección de su esposa. Y los que siguen los números de la economía que importan vaticinan que Argentina seguirá creciendo, pero a un ritmo más moderado de lo que lo viene haciendo en el último semestre.

¿Cómo podría entonces el kirchnerismo mantenerse en el poder? Sólo con una oposición sin reacción y si triunfa en su intento de manejar la agenda de los asuntos que importan durante los dos meses anteriores a la elección general, cuando los argentinos empiezan a pensar de verdad por quien votar.

Para lograrlo, el gobierno tiene que impedir que la Corte Suprema falle en contra del artículo de la Ley de Medios que les exige a los grupos desprenderse de sus activos en menos de un año. La mayoría de sus miembros habrían decidido imponer ese límite.

¿Qué sería capaz de hacer Kirchner contra la Corte, si el máximo tribunal de Justicia se transforma en el freno inquebrantable de su obsesiva voluntad?

 

Publicado en El Cronista