Carlos Pagni tiene razón. Ayer, en su programa Odisea Argentina, en su columna titulada “Periodismo, espionaje y libertad de expresión” Pagni escribió un párrafo, largo pero muy claro, en el que me alude.
Cito textual: “¿Por qué estamos hablando de esto? Porque está en discusión la actividad periodística de Luis Majul, a quien un sector del kirchnerismo acusa de haber dado información que afectaba a Hugo Moyano proveniente de los servicios de inteligencia durante el gobierno de Mauricio Macri”. Sigo: “Majul explica que nunca trató con servicios de inteligencia. Eso no importa. Tampoco importa quién le daba la información o qué intención tenía él al publicarla. Lo que importa es que Majul, como cualquier otro periodista, está en todo su derecho de recibir información de quien quiera”.
Pagni, en el editorial, hizo referencia a un juez que dictaminó, hace muchos años, que los periodistas que publicaron los Papeles del Pentágono estaban haciendo lo correcto: “Fíjese lo que dice el juez Black: no hay ningún secreto, ni aquel que podría establecerse en función de la seguridad de una Nación en guerra, que pueda anteponerse a la libertad de expresión que se canaliza en el trabajo de la prensa”. Pagni agregó: “La formas en que se ejerce esta crítica o este ataque sobre Majul también son importantes ¿Por qué? Porque se realizan desde un medio, que es C5N, cuyo propietario es Cristóbal López, un hombre que tuvo y tiene un gran enfrentamiento con el gobierno anterior y que estuvo detenido con prisión preventiva”. Sigo citando: “A través de un programa de ese medio se realiza esa crítica, donde la presencia de Hugo Moyano es muy visible, entre otras cosas porque está como columnista el abogado de Moyano”. Carlos Pagni se preguntó: “¿Cuáles son las relaciones entre Moyano y Cristóbal López? Las ignoro. Lo único que sé es que en el mercado del correo dicen que ambos podrían asociarse para capturar OCA, un correo privado con graves problemas en la AFIP, como los que tiene López, y que debe ser rescatado de alguna u otro manera, y donde Moyano tiene intereses muy importantes”. Y Pagni siguió preguntando: “¿Pero adónde estoy yendo con todo esto? A que parecería que hay una asociación entre Moyano y López para fundar algo que el líder sindical pidió y no le dieron: el ministerio de la venganza. Tendrá que hablar con Cristina Kirchner y Alberto Fernández sobre por qué no le dieron un ministerio. Pero lo que sí parece tener es el canal de la venganza.”
Pagni tiene razón.
No debería estar cada cinco minutos aclarando cosas que son tan obvias.
Pero tengo paciencia y tengo energía.
Y las voy a seguir explicando.
Porque hay algunos colegas y una parte de la sociedad que no lo termina de entender.