No somos antivacunas. Al contrario. Convocamos desde aquí a que no dudes en aplicártela, cuando te toque el turno. Sin embargo, estamos convencidos, y lo venimos diciendo desde hace dos semanas, que el gobernador Axel Kicillof, su ministro de Salud, Daniel Gollán y el viceministro, Nicolás Kreplak, montaron, en la provincia, un sistema de vacunación paralelo.
Un sistema que consiste en dejar de lado a por los menos 300 centros de vacunación de un total de 1.700 que tiene el sistema de salud de la provincia, a cambio de unas 300 postas que el gobierno controla y usa para hacer propaganda, con la fantasía de que una dosis se convertirá en un voto para el Frente de Todos.
Ya te mostramos decenas de postas montadas por el gobierno de Kicillof, donde trabajan personas especialmente contratadas, algunas sin los antecedentes mínimos, mientras se prescinde de trabajadores de la salud con experiencia solo porque es personal perteneciente a los municipios de un color político que no es el Frente de Todos. Ayer, en La Cornisa, te mostramos como, en las postas que suele montar el gobierno de la provincia, pero también en las de PAMI, entregan certificados de vacunación sin las correspondientes firmas y sellos del personal médico. Como las respuestas que nos dieron tanto en el ministerio de salud de la provincia como en el de la Nación nos parecen insuficientes, vamos a pedir el listado completo con nombre, apellido, número de documento y antecedentes, del personal que viene vacunando en nombre de PAMI y también en nombre del gobierno de la provincia. Parece que a algunos de ellos los tomaron de la noche a la mañana, y que no tendrían la experiencia mínima como para hacerse cargo del tema. Esperamos que no hayan cometido semejante error, solo para sumar votos y engordar a lo que denominan militancia. Y este es un respetuoso mensaje para el gobernador que grita pero no gobierna. Ya fracasó en su intento de acusarnos de ligarlos con los movimientos anti vacuna. Ahora es mejor que explique por qué montó un sistema de vacunación paralelo. Y por qué le sigue dando la espalda a la utilización de centros de salud de cercanía. En especial a los de los municipios controlados por intendentes de Juntos por el Cambio. No nos molesta que nos acuse de buscar el pelo al huevo. Pueden llamarnos pelohuevistas. Pero no somos militantes ni militontos. Somos periodistas, queremos informar. Y lo vamos a seguir haciendo. Aunque nos dediquen programas enteros para amedrentarnos.
Columna de Luis Majul en Radio Rivadavia