(texto de la columna editorial presentada por Luis Majul el 26 de septiembre de 2023 en LN+) Patricia Bullrich acaba de empezar una campaña distinta. Será golpe a golpe. A “matar o morir”. La candidata insistirá con que Milei tiene la casta adentro, y le volverá a pedir explicaciones por su vínculo con Luis Barrionuevo. Avanzará con la idea de que ella será la única capaz de enfrentar y no transar con los Moyano y los Baradel de la vida.
Machacará con la sospecha de un pacto, por debajo de la mesa, entre Milei y Sergio Massa. Una entente para sacarla de la cancha, evitar que pase a la segunda vuelta y pueda dar vuelta la elección. Reaparecerá Carlos Melconian, recargado, atacando de manera personal al líder de la Libertad Avanza, después de haber descalificado sus ideas. En especial las ideas de la dolarización y el plan motosierra.
Patricia Bullrich hará campaña con Mauricio Macri a su lado. Elegirá las localidades y las provincias, como Córdoba, donde el expresidente obtuvo los mejores resultados electorales. Se presentará como la verdadera opción para que el kirchnerismo se vaya y no vuelva más. Volverá a decir que, con Milei, el peligro es que regrese demasiado pronto.
En su equipo de campaña están entusiasmados. Reconocen que siguen terceros, pero aseguran que son los únicos que ahora están creciendo. Que Milei se estancó. Y que incluso habría perdido un par de puntos. Que Massa no crece. Y que la inflación, la pobreza y el plan, al que califican de explosivo, lo terminarán sacando de la cancha. Que un 30 por ciento de quienes votaron a Milei, más allá del ruido que siguen haciendo su núcleo duro, está pensando si lo volvería a hacer, ahora que llega el momento de la verdad.
También atacará con fuerza a Massa. Repetirá la idea de que Massa es Cristina y Alberto. Que con Massa estamos peor. Le volverá a poner, todas las veces que pueda, el calificativo de “ventajita”, igual que hizo Luis Petri ayer, después de que el ministro prometiera abrir su eventual gobierno a dirigentes del radicalismo.
Habrá nuevos videos de alto impacto, como el último: el spot que promete construir una cárcel de máxima seguridad para criminales peligrosos, a la que bautizaría como la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner.
Por Luis Majul